Del Juan Antonio Flecha ciclista admirábamos su omnipresencia, la calidad de sus objetivos y la posibilidad de sacar la cabeza en medio de una generación de clasicómanos irrepetible encarnada en las figuras de Boonen y Cancellara, abriendo entonces un camino de innovación y singularidad en la historia del ciclismo español, que hizo de nuestro amor por este deporte algo redondo, de doce meses al año.
Del Juan Antonio Flecha “licenciado” nos encandiló su forma de expresarse y entrar en el pelotón a través de la señal de Eurosport Internacional, paseando por los pasillos de las grandes vueltas y dándonos las claves que hacían más entendible el ciclismo.
Hoy Juan Antonio Flecha se une al pequeño pero selecto pelotón de embajadores globales de Gobik, formando equipo con Alberto Contador, Ivan Basso, Julien Absalon y Carlos Coloma, un equipo transversal, como él, que rezuma amor por el ciclismo, pero también sapiencia y “savoir faire”.
“Entiendo por embajador aquella persona con la suficiente experiencia y afinidad para hablar de una marca con credibilidad y conocimiento” empieza comentándonos ya desde su domicilio de Castelldefels, consciente de saberse en un barco que mira el futuro cargado de optimismo pero también de responsabilidad.
Años cargados de actividad y aprendizajes
Desde que dejó el ciclismo Flecha ha estado presente de forma más o menos constante en el mundillo, sacando partido a su master en marketing y estudio de mercados, cursado en la UOC, contrayendo matrimonio y disfrutando de vivir en el filo, con dos niñas muy pequeñas en casa.
Por medio, al margen de verle y escucharle en Eurosport, inauguró su canal de Youtube hace más o menos un año para trasladar su sentimiento ciclista a través de imágenes, subido a su bicicleta.
“Se ha convertido en un hobby que pasa a ser algo más serio -afirma sobre su canal al calor del “fichaje” por Gobik-. En todo caso el contenido será muy similar al realizado hasta ahora con los obvios guiños a la marca y algún contenido periódico según las necesidades”.
Un canal que busca “trasladar mi percepción democrática de este deporte, pues nos iguala a todos, nos pone en un mismo plano y eso es muy atractivo. Mi visión del ciclismo es peculiar pero creo que compartida por mucha gente, aquí todos ganan, de una manera u otra. Está claro que hay una élite más reconocida, pero en una gran vuelta el último que llega a meta se lleva el reconocimiento y cariño de la gente, es decir, también ha ganado, en cierta manera”.
Una percepción peculiar que admite “se deberá mantener para siempre en ciclismo, por que si todos ganan, el ciclismo gana”.
De Flecha Gobik ha valorado “su estilo, sin estridencias, y cuidado por los detalles de sus vídeos -comenta Alberto Ayala, responsable de marketing de la marca- además de su trayectoria profesional. Esos han sido elementos claves para este acuerdo”.
“Nos sentimos muy identificados con él y pensamos que están muy en sintonía con lo que Gobik quiere significar” concluye.
De esta manera Flecha ya ha empezado a pedalear en la casa, siendo el encargado de presentar el Black Friday solidario de Gobik para este año y desvelar el futuro maillot de Save The Children.
La historia de Flecha con Gobik
Flecha define Gobik en tres palabras: “Moderna, innovadora y ágil”. Tres adjetivos que conoció de primera mano cuando hace unos años su amigo Javier Maya le hizo llegar unas piezas de su conocida tienda Pavé, en el Prat de Llobregat, para vestir en alguno de los “recons” de puertos que realizó para Eurosport en la Vuelta a España de 2016.
“Esa carrera la recuerdo con mucho cariño por que la seguí desde mi furgoneta, salvo los días que dormí en hotel, que fueron los de descanso. Usé las prendas que me dio Javi casi a diario y aprecié cómo duraban tras los diferentes lavados a mano que tuve que realizar” rememora Flecha.
De aquella primera experiencia surgió un conocimiento que fue a más, y que ahora confluye con Flecha formando parte de la familia de Gobik, una familia que crece.
Textos: El Cuaderno de Joan Seguidor
Fotos: Pol Giné