En la lucha contra el deterioro del clima, de nuestro entorno y de la sociedad ya no hay más vuelta de hoja que una apuesta decidida, que vaya más allá de lo obvio y lo que vemos en un primer vistazo.
Desde hace tiempo, Gobik ha demostrado con acciones y hechos su compromiso con el entorno, la sociedad y su gente, pero ahora, esa forma de hacer tiene un nombre “Ride to cut” o R2C y viene para marcar la hoja de ruta de la empresa.
“La implantación de “Ride to cut” no es más que poner en valor algo que hace años que practicamos y que no comunicábamos de manera formal. Con esta comunicación buscamos una mayor concienciación de la sociedad hacia estos temas, más que buscar un incremento de valor o percepción de marca” nos explica Alberto García, CEO y cofundador de Gobik.
Siempre pendientes de la sociedad
Para José Ramon Ortín, “Ride to cut” quiere transmitir de forma inequívoca que la marca está comprometida tanto con la sociedad, como con el cuidado del medio ambiente, en un momento en el que todos estamos más sensibilizados que nunca con estas cuestiones”.
Devolver al entorno parte de lo que éste le ha dado a Gobik ha sido una de las premisas fijas en la empresa.
De esta manera, Gobik ha contribuido en compañías como Leadartis, pioneros en tratamientos de tumores agresivos, y sumado a propósitos como el “Reto Pelayo” en la divulgación de la vida sana como prevención al cáncer de mama, y “Mi Princesa Rett”, recaudando fondos para luchar contra esta enfermedad rara, sin olvidar ediciones especiales para la Cruz Roja España y Save the Children.
Otro punto importante en esta historia es la cercanía de Gobik con su entorno, una apuesta por la producción desde Yecla y su comarca, siempre instalado en su tierra de origen, repercutiendo entre los que tiene más cerca y reduciendo costes y emisiones en la logística del aprovisionamiento.
Un decálogo social que se recoge en “Ride to cut” y se extiende también a la gente que trabaja en la empresa: “El nacimiento de la marca ya vino de la mano de aspectos relacionados con la fabricación local y el desarrollo de la industria en nuestra región y país- añade Alberto García-, priorizando el uso de energías renovables, el bienestar y conciliación de los que conformamos la familia de Gobik”.
“Ride to cut” en la ropa de Gobik
El aspecto más tangible para el usuario de Gobik de toda esta estrategia llegara cuando tenga una prenda en la mano. Ante el próximo lanzamiento de su Warm23, la colección de verano, la marca ha extendido las premisas de “Ride to cut” a casi todo su catálogo, con una mayoría de prendas confeccionadas con al menos un 60% de materiales reciclados.
En palabras de Ángel Lencina, Product Development Manager de Gobik, vamos a un escenario en el que una gran parte de las prendas “va a tener fibras fabricadas a partir del reciclaje de botellas de plástico o excedentes de producciones anteriores”.
El y la ciclista verán en la prenda su origen en este tipo de materiales y una pequeña inscripción, dejando constancia del compromiso de la marca plasmado en la pieza, que además vendrá sólo con una etiqueta con un QR que conducirá a la web de la marca y dentro de un packaging de bolsas de origen reciclado, para cerrar el círculo y promover un consumo coherente para la preservación del planeta.
