Lina, la mujer que conquistó 1000 cimas en 10 años

En el mundo del ciclismo hay historias muy inspiradoras, pero pocas tan cautivadoras como la que ha protagonizado Lina. Sin mucha tradición ciclista (en su familia han sido siempre más de baloncesto), ha conseguido el reto que se propuso, conquistar 1000 cimas de todo el mundo montada en su bici, pero es que además, ha sido la chica más rápida en hacerlo, tardando 10 años, cuando lo habitual son 30, es decir, una auténtica barbaridad.

A lo largo de todo este tiempo, Lina ha hecho muchos amigos, que al mismo tiempo se han convertido en auténticos admiradores de su proeza, y es que al final, 1000 bigs dan para conocer a muchas buenas personas. Ese sentimiento se tradujo en un regalo que nuestra protagonista nunca podrá olvidar, un maillot conmemorativo para la ocasión. Esa fue la idea que sus amigos tuvieron para celebrar esos 1000 bigs, darle a Lina una piel que rindiese homenaje a todo este camino que había y seguía recorriendo.

Obviamente, aquí es donde aparece Gobik y su servicio de customización, así lo cuenta uno de sus amigos, "Queríamos algo que no se pudiera comprar. A partir de ahí y pensando, llegamos a la idea de hacer un maillot específico y conmemorativo para ese día. Algo que fuera único y del que solo hay los maillots que hicimos. A través del club en el que estoy (BERA BERA) en San Sebastián, me facilitaron el contacto de GOBIK. La verdad es que a la marca le entusiasmó la idea. Con las indicaciones que les hicimos diseñaron el maillot y no hubo que hacerle ni una sola modificación. Acertaron a la primera y quedamos todos muy satisfechos."

Una historia como la de Lina, se merecía una prenda única y conmemorativa, y desde Gobik estamos tremendamente orgullosos de haberla hecho realidad, de haber contado una historia tan inspiradora que comenzó de la nada, y que ha llevado a cabo una chica totalmente normal, como ella dice cuanto le hemos preguntado, "¿Quién es Lina?", "Me definiría como una persona como cualquiera de nosotros, con sus compromisos familiares, laborales, y que tenemos necesidad de encontrar tiempo para la vida cultural, social y deportiva. Buscamos balance entre todo esto robando el tiempo al tiempo o intentando buscar equilibrio poniendo dos tics de un tiro . Como buscar viajes familiares más cerca de montañas y madrugar mucho para subirme algún puerto o decirles , dejarme aqui y ya nos veremos para cenar en el hotel . Soy afortunada de tener mi familia tan generosa. Así que entre su apoyo y maravillosos amigos que tengo iba sumando los Bigs durante los años". Y de subida en subida, se vio inmersa en un reto que no había comenzado conscientemente, pero al que la vida le había llevado de forma natural.

Al visualizar este tipo de retos o hazañas, el ojo siempre está puesto en el final, sin embargo, lo realmente importante es el camino que recorres, como en la vida misma vaya, y así lo explica perfectamente Lina, cómo su corazón y cabeza, el día que alcanzó el 1000 big estaban en todo lo recorrido hasta ese día, en todas las personas y vivencias que había podido disfrutar, "El día del 1000, qué día , estuve con un nudo en la garganta todo el finde, más de una lágrima de felicidad. Y diré la verdad no por llegar a los 1000 y ser protagonista de un evento que los amigos y familia me organizaron, sino por lo que me ofreció el camino, por la gente que conocí, que al compartir este camino se convirtieron en muy buenos amigos, no son solo compañeros de bici, son lazos invisibles que tenemos entre nosotros, una amistad incondicional. Tenerles a todos allí me emocionaba y ya no hablar de los detalles inesperados como el maillot de Gobik personalizado para la ocasión. El detalle impreso de la tela que dejaba imagen de un ciclista recién bajado de bici tras haber pedaleado km en camino de gravel, la sonrisa cómplice y uno se giró enseñar mi nombre en la manga!!! Wow no daba crédito, no me lo esperaba. Muy agradecida, creo que la llevaré par de salidas para presumir y la guardaré para recuerdo, es regalo muy especial."

Con estas palabras, en Gobik nos sentimos plenos, hacer sentir especial a la gente especial es un privilegio, contar este tipo de historias, de hitos en nuestras prendas en un orgullo, y uno de los motivos por los que siempre abrimos las puertas a todas y cada una de las personas que quieren hacer especial su prenda para salir en bici.

PREGUNTAS

¿Cómo conocisteis a Lina?

La conocimos en un viaje de BIG en el año 2016 en el que íbamos a hacer la Via di Sale en los Alpes italianos que hacen frontera con Francia. Fue un viaje que abrimos a más gente y entre las personas que acudieron vino Lina, y allí fue donde compartimos ruta por primera vez.

¿La habéis acompañado en sus ascensiones?

A lo largo de estos 8 años desde que la conocimos, hemos compartido viajes y ascensiones. No todos, porque el ritmo que llevaba Lina era frenético, pero siempre al año coincidíamos en algún viaje común.

¿Cómo llegasteis a la idea de hacerle ese maillot?

Queríamos algo que no se pudiera comprar. También le regalamos un álbum de fotos personalizado de estos años de los viajes que hemos compartido. A partir de ahí y pensando, llegamos a la idea de hacer un maillot específico y conmemorativo para ese día. Algo que fuera único y del que solo hay los maillots que hicimos. A través del club en el que estoy (BERA BERA) en San Sebastián, me facilitaron el contacto de GOBIK. La verdad es que a la marca le entusiasmó la idea. Con las indicaciones que les hicimos diseñaron el maillot y no hubo que hacerle ni una sola modificación. Acertaron a la primera y quedamos todos muy satisfechos.

¿En qué se basa el diseño?

Es una mezcla un poco de todo. El reto BIG son 1000 ascensiones por todo el mundo. Ese dato tenía que aparecer. Luego el dato de que Lina ha batido el récord de tiempo en completarlo, lo ha hecho en 10 años (desde 2014 que hizo el primero a 2024 que hizo el último). La media suele rondar los 30 años para acabarlo. Luego quisimos por supuesto personalizarlo con su nombre de pila “Lina”. También pusimos la fecha en que iba a concluir el reto (23 de junio). Y, por último, y dado que el puerto a subir era el mítico colle delle Finestre, quisimos añadirle la altimetría hecha por uno de nosotros.

¿Cómo fue el proceso con GOBIK?

Muy sencillo. Tras hablar con la persona encargada de pedidos y explicarle la casuística, quedó encantando. Accedió de inmediato a hacer el pedido pese a que realmente no eran un número elevado (15 maillots se hicieron y 15 se pidieron). Nos puso en contacto con los diseñadores, los cuales con las indicaciones arriba mencionadas y el logo del BIG y el perfil que adjuntamos, hicieron el resto.

¿Cómo fue el momento de dárselo?

Muy emocionante. Ni sabía ni se esperaba nada. Quedamos todos en la habitación y esperamos a que ella bajara a la zona del desayuno. Sabíamos que estaría inquieta y estaría en cuanto abrieran el restaurante. Cuando nos indicaron que ya estaba abajo, fuimos todos con una chaqueta que nos tapaba el maillot que portábamos y al saludarla nos quitamos las chaquetas y se quedó mirándonos fijamente al ver que todos íbamos igual vestidos. No asoció nada hasta que empezó a ver los detalles y a cada cosa que descubría pegaba un grito más y más fuerte. Menos mal que eran las 7.30 de la mañana y que aparte de nosotros sólo había una pareja desayunando. ¡Fue un escándalo!

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