Para Jofre Cullell, cuando planificaba el 2021, la edad nunca fue un motivo para amedrentarse ante la posibilidad de ir a los Juegos Olímpicos. Al contrario, cuanto antes fuera, mejor: vivir experiencias irrepetibles y medirse en un escenario al que sólo van los mejores.
Curiosamente su primer recuerdo olímpico no es ciclista: “Siempre he admirado mucho a Usain Bolt, me ha parecido lo más. Le recuerdo ya en Londres 2012, pero sobre todo en sus últimas carrera en Río de Janeiro. Me ha gustado mucho el atletismo desde siempre y él ha estado en lo más alto. Cuando le veía ahí en la pista, con todo el mundo aclamándole, pensaba en el enorme trabajo que había detrás”.
De ciclismo le vienen imágenes de la carrera en la que Marco Aurelio Fontana perdió el sillín. “Qué pena que José -Hermida- no le pillara para entrar en el podio en Londres -comenta-. También me acuerdo del bronce de Carlos -Coloma- en Río”.
Para Jofre, los Juegos Olímpicos son el gran evento del deporte “pero tampoco hay que obsesionarse. La carrera en sí es similar a una de las Copas del Mundo que tan acostumbrados a correr cada año. Me da cierto respeto, sí, pero hay que armarse de valor, hablamos de un evento mundial, muy importante también para la publicidad de nuestros patrocinadores, todo el mundo nos verá por la televisión”.
Dice esto último, sabedor de que no habrá público en la cuneta: “Parece un poco descafeinado, pero es lo que hay”.
Una cita que te puede cambiar la vida
Más allá del resultado, Jofre admite que “la influencia que tienen es enorme, todo lo que suceda ahí puede marcar nuestra carrera deportiva. Una prueba la tuve cuando comunicaron mi nombre dentro de la selección, aquellos días fueron de locura, de gente llamando e interesándose por mí”.
Jofre estuvo en el preolímpico de 2019. De entonces conoce el recorrido “Muy técnico, duro y explosivo. No sé si habrá cambiado algo, pues leí que se inundó al año siguiente, pero lo recuerdo muy incómodo”.
Él va a por todas, sin pensar ni siquiera si en París, en tres años, va a tener otra oportunidad. “Esto va paso a paso, pero hay que aprovechar cualquier oportunidad que se me presente, sin pensar en le futuro. Hablamos de una carrera de un día, y todo puede suceder.
Marca los mismos rivales que tiene en el calendario normal de Copas del Mundo, a las que acude con el Primaflor-Mondraker-X Sauce, el equipo gestionado por Fran Pérez que viste Gobik desde sus inicios: “Su ropa es un buen aliado, sobretodo en el día a día, sus piezas y segunda piel hacen que trabajes muy cómodo. Es como si no llevaras nada encima”.
Viajan a Tokio una semana antes de la carrera, dormirán en un alojamiento cerca del circuito. Su fecha en Tokio es el lunes 26 de julio.