De Turín a Milán, tres semanas por Italia, saliendo del norte, arribando a Foggia, lo más al sur, para jugar el grueso de la carrera de nuevo arriba de la bota. El Giro de Italia propone la primera gran vuelta del año, con un cartel de lujo y un reto en muchas direcciones para el UAE Team Emirates.
El ocho del primer UAE Team Emirates
Con eminente presencia italiana en todas sus líneas, desde corredores a staff, dispondrá de un ocho competitivo en todos los renglones de la carrera, sin descuidar ninguno de los objetivos que cuelgan de una vuelta de tres semanas.
Vestido por Gobik para el Giro de Italia está formado por Valerio Conti, Alessandro Covi, Joe Dombrowski, Davide Formolo, Fernando Gaviria, Sebastián Molano, Max Richeze y Diego Ulissi.
“Es un equipo compensado con mucho pedigrí”, así lo describe el Team Manager Joxean Fernández Matxin.
Reparto de roles
En principio Davide Formolo es el hombre de fondo. “Es una carrera especial para mí, aquí logré mi primera victoria como profesional” recuerda el corredor sobre aquella etapa que ganó en solitario en 2015. “Davide es nuestro hombre para la general, tiene tres top ten en grandes vueltas y creemos que puede mejorar” apunta Matxin.
Luego está Diego Ulissi, una leyenda en Italia, “con ocho victorias y varios días que le van a la perfección” presenta el responsable del UAE Team Emirates. Con Dombrowski y Conti, líder hace un par de Giros, en labores de equipo, se presenta la otra parte del grupo, la de velocistas.
Aquí Fernando Gaviria, ganador de cinco etapas en el Giro, es el pivote sobre el que gira todo el trabajo. “Para Fernando tenemos a Richeze y Molano que estarán con él en las etapas llanas” sostiene Matxin quien no esconde debilidad por Covi, “quien debuta en una gran vuelta”.
En definitiva: “Hablamos de una carrera muy importante para el equipo y queremos ser protagonistas en cada etapa”.
Por la “Bella Italia”
Por delante un interesante trazado que parte de la capital de los Saboya, Turín, con una crono de menos de nueve kilómetros, que significará la primera de dos, pues la final ya será en Milán, con poder decisorio sobre el ganador, como vimos el año pasado en la versión de otoño del Giro.
Por medio varias jornadas marcadas ya en la primera semana. Algunas quebradas, con atractivo eminentemente italiano, como la llegada a la medieval Sestola y la primera llegada en alto en la cima de Ascoli Piceno con Campo Felice en el segundo domingo de carrera.
La reanudación del Giro tendrá lugar entre viñedos toscanos y sterrato blanco en ruta hacia Montalcino. Será el inicio de la segunda fase de carrera, esa que volverá por la Emilia Romagna al norte como entremés al Monte Zoncolan, ya en el tramo decisivo de la carrera, ahí donde el embajador de Gobik, Ivan Basso sentenciara su segunda victoria en la carrera rosa. El segundo ciclo de etapas del Giro concluirá con una jornada dolomítica por excelencia, llegando al paraíso de Cortina d´ Ampezzo tras subir Fedaia, en otras palabras Marmolada, Pordoi y Giau.
La semana final será un “in crescendo” en dureza, con una primera jornada en alto en Sega di Ala, más el Alpe di Mera y el colofón del Valle de Spluga a 24 horas de llegar a Milán, cuyo Duomo volverá a ser testigo de un ciclista que, con el Giro en el bolsillo, seguro que le esperará una vida muy diferente.
Por El Cuaderno de JoanSeguidor
Fotos BettiniPhoto / Fizza Photo
